Juego travieso de piedra, papel o tijera con la tetona Tahlia Lane

Tahlia Lane, ¡qué nombre! Hoy me ha llamado la atención este bombón y no he podido resistirme a invitarla a un juego amistoso de piedra, papel o tijera. Ella no sabía que había mucho en juego: ¡el perdedor tenía que enseñar sus cosas! ¿Y adivina qué? Ella perdió. Con una sonrisa pícara, se levantó el vestido y dejó ver su coño perfectamente esculpido. La cosa estaba que arde, y las dos lo sentíamos. Tahlia se arrodilló como una profesional y rodeó mi creciente erección con sus labios. Su mamada era el paraíso, y yo estaba listo para pasar al siguiente nivel. Abriendo bien las piernas, me dio la bienvenida a su apretada y acogedora vagina. Exploramos todas las posturas imaginables: misionero, perrito e incluso un rapidito en el suelo. Tahlia estaba insaciable, cabalgándome como un caballo salvaje y gimiendo de placer. Para rematar, terminó chupándomela de nuevo, tragándose hasta la última gota de mi semen con una sonrisa de satisfacción.