Con traje, con botas, se corre en su boca
El otro día recogí al sexy hombre de negocios Denis Marti, que tenía que ir a una reunión importante. Cuando llegamos a su destino, el bigotudo semental se sorprendió por el precio del billete. Le ofrecí descaradamente un descuento a cambio de favores sexuales, ¡y aceptó! Aparqué el taxi y me senté en el asiento trasero con el euro. Ya tenía la polla fuera y no pude resistirme a rodearla con mis labios. Aunque Denis era un hombre casado, me dejó chupársela, y luego le hice una paja cubana antes de enseñarle mi coño mojado. Después de follarme en la posición del misionero, el italiano moreno me lamió los labios y el clítoris, y luego me puse a saltar sobre su polla en vaquera, lo que hizo que mis grandes tetas se agitaran. Para terminar, salimos del Fake Taxi, donde Denis me folló a lo perrito hasta correrse en mi boca.